Proyecto comunicativo para el desarrollo Pensamientos Urbanos para la creación de un espacio interactivo de comunicación entre ciudadanos de Quito, a través de carteleras ubicadas en el interior de las paradas de buses que hacen parte del sistema vial Metropolitano Trolebus y Ecovía

Quito, como toda capital latinoamericana, es una ciudad de diversidad. Las culturas de América Latina tienen un largo trayecto de hibridez, empezando por la mezcla étnica y cultural, producto de la colonización, y siguiendo por los diversos contactos y redes establecidas a partir del proceso de G...

Descripción completa

Autor Principal: Gleich, Cristina
Formato: bachelorThesis
Idioma: spa
Publicado: 2012
Materias:
Acceso en línea: http://dspace.ups.edu.ec/handle/123456789/2529
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Sumario: Quito, como toda capital latinoamericana, es una ciudad de diversidad. Las culturas de América Latina tienen un largo trayecto de hibridez, empezando por la mezcla étnica y cultural, producto de la colonización, y siguiendo por los diversos contactos y redes establecidas a partir del proceso de Globalización. La cultura latina es una cultura de mezcla, una cultura que importa diversos bienes, discursos y prácticas simbólicas, apropiándose de ideas, tradiciones, productos, modos de comportarse y de vestirse. Esta hibridez la podemos evidenciar en prácticamente todos los ámbitos de la vida urbana, convirtiendo a la ciudad en un espacio de diversidad étnica, cultural, religiosa, económica, histórica, lingüística, social, política, artística, etc. Esta diversidad urbana representa una riqueza incalculable, pero a la par trae conflictos, por el mismo hecho de que no todos viven y piensan de igual manera. Para la aceptación de esta diversidad es necesaria una actitud de respeto y tolerancia hacia el “otro”, el que es diferente a mí. Este respeto no es posible si no hay un acercamiento mediante el cual se puede conocer a este “otro”, saber cómo piensa, siente y entiende al mundo que lo rodea. Entonces surge la pregunta: ¿cómo puedo conocerlo? Sabemos que en el espacio urbano compartimos un territorio con miles de personas. Al salir a la calle, viajar en un bus, descansar en un parque, comer en un restaurante, vemos pasar a estas personas, pero no por verlas o compartir un espacio físico con ellas, las conocemos. Y es más, como Bordieu1 ha explicado, tendemos a compartir espacios y crear relaciones sociales con las personas que están en nuestra misma clase social, que comparten las mismas posibilidades, condiciones, prácticas e intereses que nosotros.