La política exterior de Álvaro Uribe (2002-2006) : una lectura desde el realismo subalterno

Colombia es un país que vive una situación de inseguridad y violencia interna que afecta al país y a la región ya que perjudica su desarrollo económico, seguridad, estabilidad política y orden interno. Esta realidad ha llevado a los gobiernos colombianos a crear alianzas y a desarrollar políticas, p...

Descripción completa

Autor Principal: Rendón Chaverra, María Camila
Formato: Trabajo de grado
Publicado: Pontificia Universidad Javeriana 2018
Materias:
Acceso en línea: http://hdl.handle.net/10554/35827
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Sumario: Colombia es un país que vive una situación de inseguridad y violencia interna que afecta al país y a la región ya que perjudica su desarrollo económico, seguridad, estabilidad política y orden interno. Esta realidad ha llevado a los gobiernos colombianos a crear alianzas y a desarrollar políticas, planes e iniciativas para ponerle fin al problema. Álvaro Uribe Vélez, presidente de Colombia durante el periodo 2002-2010, quiso enfrentar este problema, y por esta razón concentró su gobierno en la política de defensa y seguridad democrática. Uribe desarrolló una política exterior que vinculó con la de seguridad a través de su cercanía con Estados Unidos, para así lograr cumplir con los propósitos de recuperar el control del territorio nacional, solucionar el problema de los cultivos ilícitos, erradicar el conflicto armado, proteger la infraestructura nacional y lograr un desarrollo económico que trajera prosperidad económica al país. Los postulados del Realismo subalterno se adaptan a lo que sucedió en la política exterior del 1° gobierno de Uribe, ya que, desde mi punto de vista permiten analizar a Colombia debido a sus características sociales, económicas y políticas que demuestran que es un Estado con vulnerabilidades internas. Estas vulnerabilidades han tenido efectos sobre su desarrollo, seguridad y la propia política exterior. Durante la presidencia de Álvaro Uribe la política exterior tuvo como objetivo solucionar los asuntos domésticos ya que el escenario colombiano de inseguridad interna, la intensificación del fenómeno del narcotráfico y la crisis humanitaria requerían un apoyo internacional, de acuerdo al realismo subalterno.