“Políticas públicas nutricionales de información al consumidor: sistema de etiquetas adoptado por el Ecuador en el 2013”

El sector alimentario1 constituye a nivel mundial una actividad determinante para un Estado en cuanto es la encargada de la producción de alimentos de carácter crucial para la reproducción humana; sin embargo, por distintas problemáticas políticas, culturales, naturales, entre otras, el acceso qu...

Descripción completa

Autor Principal: Bucheli Martínez, Michelle Lorena
Formato: bachelorThesis
Idioma: Spanish / Castilian
Publicado: PUCE 2017
Materias:
Acceso en línea: http://repositorio.puce.edu.ec/handle/22000/13364
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Sumario: El sector alimentario1 constituye a nivel mundial una actividad determinante para un Estado en cuanto es la encargada de la producción de alimentos de carácter crucial para la reproducción humana; sin embargo, por distintas problemáticas políticas, culturales, naturales, entre otras, el acceso que las personas tienen a los mismos, no es de igual proporción para todos. Los gustos y hábitos alimenticios, a finales de los años setenta y durante los ochenta se vieron modificados por el surgimiento de nuevos alimentos procesados, creados por distintas empresas para disminuir el tiempo y facilitar la cocción de los mismos, factores, que con el tiempo, provocaron en el consumidor la necesidad de utilizar estos productos; es decir, el sector alimentario mundialmente está dominado por el sector agroindustrial que produce los alimentos procesados. El sector alimenticio se ha convertido en un negocio, en el que diez empresas transnacionales como: Nestlé, Pepsico, Kellogg, Unilever/Bestfoods, Philip Morris, Groupe Danone, H.J. Heinz, Nabisco, General Mills, Campbell Soup (Nestle, 2003, pág. 12), tienen el control sobre la cadena productiva de alimentos, limitando la capacidad de trabajo de las pequeñas empresas y de los agricultores. La creciente demanda por alimentos generó cierto temor de no poder cubrir con esta necesidad, lo que incentivó a la realización de distintas investigaciones científicas que permitan disminuir el tiempo de producción y aumentar la cantidad de productos. Este proceso es conocido como la Revolución Verde, que se produce entre los años cincuenta y sesenta, que consiste en la utilización de semillas híbridas de mayor rendimiento junto a fertilizantes, agroquímicos y el riego, para aumentar el rendimiento y el volumen de la producción. Actualmente, la utilización de estas semillas ha evolucionado hacia el uso de semillas genéticamente modificadas, generando debates muy amplios y cuestionamientos básicamente en tres aspectos: el primero, se refiere al daño causado en la tierra después de su uso; el segundo, está basado en que la producción obtenida está destinada en gran porcentaje al sector ganadero; y el tercero, hace referencia a los efectos sobre la salud del ser humano